Reflexiones políticamente incorrectas sobre el Brexit
Roberto Savio|
Si me permiten, voy a contar una inusual anécdota personal. En 1965, entrevisté a Lord Hume, quien hacía poco había dejado de ser primer ministro de Gran Bretaña, y enseguida simpatizamos. Entonces me invitó a almorzar a la Cámara de los Lores. Degustando una deliciosa pierna de cordero escocés le expliqué que había comenzado mi carrera profesional como Kremlinólogo y que me había servido para comprender la política exterior británica, ya que me recordaba el hermetismo del Kremlin. Un día Europa era la…