Entre el “trino” en la red y la bala en la calle

NÉSTOR FRANCIA | En otra parte hemos señalado como la derecha se propone usar con frecuencia el Twitter y otros medios electrónicos para sembrar y difundir rumores desestabilizadores, y asentamos que “esto es parte de un formato que volverá a ser ensayado: generar matrices por medios electrónicos”. Este método ya no es novedoso. Las muertes en Siria tampoco.
 Néstor Francia* – Sur y Sur

Lo que comienza a variar es la intensidad y la frecuencia con las que la contrarrevolución lo está aplicando, dentro de una estrategia evidente de exacerbación de la conflictividad y la violencia, según el guión de escalada desestabilizadora que nos hizo llamar alguna vez a 2012 como “el año que viviremos en peligro”.

Ahora, a consecuencia de la suspensión temporal de clases ante las intensas lluvias que ponen en riesgo la infraestructura educativa, el Twitter ha sido utilizado para tratar de que cunda el pánico entre padres y representantes, regando la derecha la matriz de que las clases serían suspendidas hasta enero, lo cual por supuesto desbarajustaría la vida cotidiana de las familias y el febril ritmo que la suele acompañar en las festividades decembrinas. La ministra de Educación, Maryann Hanson y los medios públicos tuvieron que salirle al paso a esos falsos rumores.

Los conspiradores electrónicos utilizaron una información correspondiente al año 2010 para dar credibilidad a su patraña.

Sondeos y encuestas

Dentro de la intensificación de la ya tradicional guerra de encuestas, la encuestadora de la derecha Keller y Asociados ha mostrado un supuesto estudio que establecería que tres candidatos opositores (Capriles, Pérez y López) derrotarían a Chávez en las presidenciales de 2012. Igualmente reporta Keller otros ítems que desfavorecerían al presidente.

No nos queda otro remedio que recordar una vez más un dato histórico que indica cuánta credibilidad se le puede dar a esta empresa. El 15 de diciembre de 2008, dos meses antes del referéndum sobre la posibilidad de elegir indefinidamente al Presidente de la República (y no a Chávez en particular), Keller y Asociados presentó una “encuesta” con la supuesta intención de voto para el momento.

Según el “estudio”, solo el 31% de los electores aprobaría la propuesta de la revolución, mientras el 68% se opondría. El día del referéndum se conocieron los reales resultados, que daban a la propuesta de Chávez un apoyo de 54,86% y un rechazo de 45,13%. Ahora Keller está de nuevo cumpliendo su papel asignado y repitiendo desvergonzadamente la película.

Comentarios en Estados Unidos parecen confirmar la apreciación de cómo el éxito inicial de la CELAC ha incidido en la posición del país imperial ante la nueva organización latinoamericana y caribeña. “Estados Unidos ha aceptado que ha cambiado, que no tiene la influencia o el espacio que tenía en América Latina”, declaró el presidente del centro de análisis en Wáshington Diálogo Interamericano, Michael Shifter, y añadió que la CELAC “es una expresión política de un distanciamiento de los países de América Latina y el Caribe frente a Estados Unidos”.

Por su parte Cynthia Arnson, directora del programa para América Latina del centro Woodrow Wilson, consideró que ahora el Departamento de Estado “reconoce que América Latina ha alcanzado un nivel de independencia y autonomía y una sofisticación política y económica, que hace natural la existencia de estos grupos regionales”.

Los mismos analistas expresan que el futuro de la CELAC dependerá en mucho de que la nueva organización se convierta en algo más que un foro donde solo se intercambian discursos, y en ello llevan razón. También opinan que la OEA no desaparecerá ni será sustituida en el futuro cercano. Sobre esto último, creemos que a la larga no será necesario que nadie le dé el tiro de gracia a la OEA. Es obvio que este vetusto aparato está en un proceso de lenta agonía que lo conducirá inexorablemente a su muerte natural.

Siria, un paralelo

Declaraciones del presidente sirio, Bashar al Assad, nos traen a la memoria los sucesos de abril de 2002 en Venezuela. Assad ha negado firmemente que él haya ordenado la represión violenta de los opositores que reclaman su renuncia y sostuvo que la mayoría de las personas que han muerto durante los últimos meses en la turbulencia política en Siria han sido sus simpatizantes y soldados del gobierno.

Como es conocido, el día 11 de abril de 2002 francotiradores y agentes de la derecha dispararon a mansalva contra hombres y mujeres del pueblo que defendían el Palacio de Miraflores frente a las hordas fascistas que pretendían asaltarlo. El noventa por ciento de los muertos y heridos de ese día fueron bajas de los revolucionarios. Pero la contrarrevolución tomó la masacre de su autoría como pretexto para justificar el golpe de Estado y al día siguiente la canalla mediática nacional e internacional se dedicó a fijar con firmeza y universalidad la matriz de que tal masacre era obra de nuestro gobierno, para así consagrar la asonada reaccionaria y proimperialista.

Para muestra baste este párrafo de un reportaje de El Universal del 13 de abril bajo la rúbrica de Javier Brassesco: “Comentaba Sábato que los ideales nacen dulces y mueren feroces. No sé si la mala hora chavista nació dulce, pero vaya que murió feroz: protagonizó el capítulo de mayor infamia de toda la historia venezolana, con sus bandas armadas disparando valientemente y a discreción contra una multitud inerme”.

De manera que los venezolanos sabemos muy bien de qué habla el presidente Assad.

* Periodista.